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Más armas experimentales que no llegaron a cuajar

El siglo XX fue testigo de un puñado de ideas alocadas que nunca llegaron a cuajar. Desde rifles pensados para lanzar armamento nuclear a pocos kilómetros de distancia hasta tanques que podían alzar el vuelo, cualquier idea podía ser válida en el contexto de la Guerra Fría.

Seguimos con algunas más de las que os enseñamos en el anterior artículo. ¿No lo vistéis? Pues clicad aquí: 

--> 5 armas experimentales que fracasaron estrepitosamente

RAH 66 Comanche.

Diseñado para ser un helicóptero con capacidades de sigilo, el Comanche quedó obsoleto cuando los drones entraron en acción. ¿El problema? Que este invento fallido dejó un agujero de 7.000 millones de dólares en las arcas de Estados Unidos.

A-90 Orlyonok.

Este ekranoplano podía alcanzar alturas de hasta 300 metros y estaba concebido para misiones de asalto. Se planeó construir hasta 120 unidades aunque el colapso de la Unión Soviética motivó que sólo se fabricaran unas pocas unidades.

El Monstruo del Mar Caspio.

El segundo ekranoplano de esta lista era un vehículo pensado para avanzar sin ser detectado hasta las costas de Estados Unidos y lanzar más de 100 toneladas de misiles nucleares sobre las ciudades de la costa este. La marina rusa lo utilizó como método de transporte durante los años noventa.

Submarino I-400.

El ejército japonés se sacó de la manga en la Segunda Guerra Mundial un submarino capaz de transportar aviones. El I-400 fue el primer en lograrlo y podía transportar tres cazas Seiran armados con bombas o torpedos.

Horten HO 229.

Este prototipo de cazabombardero alemán nunca llegó a despegar en los últimos compases de la Segunda Guerra Mundial pero estaba previsto que pudiera cargar más de mil kilos de bombas, volar mil millas y alcanzar una velocidad de mil kilómetros por hora.

Antonov A-40.

Si un jeep volador te parece ridículo, espera a ver un tanque con alas. Esa era la idea detrás del Antonov A-40, un carro de combate acoplado a un planeador que era capaz de plantarse en el campo de combate y combatir al enemigo en cuestión de minutos. El proyecto se abandonó por falta de medios económicos.